Diagnostico Rápido De Las Caracteristicas Fisicoquimicas Y Microbiologicas De Las Fuentes Hídricas De La Cuenca Baja Del Río Manzanares

Abstract

El desarrollo de esta investigación se llevó a cabo en el periodo comprendido en los meses de junio a diciembre de 2010, para ello se seleccionaron seis puntos de muestreos, ubicados en las quebradas Donama, Vira Vira, Matogiro, Chucunchaca, Río Manzanares y agua de suministro del Corregimiento de Bonda, en la cuenca baja del río Manzanares; con el fin de establecer la calidad del agua a través de las características fisicoquímicos y microbiológicos, los posibles usos y la percepción de los usuarios respecto a las condiciones del recurso, que permitan estrategias de protección de la salud pública y medio ambiente. Para la evaluación de la calidad del recurso se implementó los índices de calidad establecidos por el IDEAM, encontrándose que las aguas de la Quebrada Donama presentan las mejores condiciones fisicoquímicas y microbiológicas, categorizadas como un sector de buena calidad hídrica. Así mismo el agua de las quebradas Vira Vira, Donama, Matogiro, Chucunchaca, Río Manzanares puede ser utilizada en fines agrícolas, pecuarios, preservación de fauna y flora y mantenimiento de ecosistemas asociados. En este estudio se demostró una vez más que el agua suministrada al corregimiento de Bonda no cumple con las condiciones de color, turbiedad, concentraciones de nitritos y los Coliformes totales y fecales establecidas en la resolución 2115 de 2007 para dicho fin. Las estimaciones estadísticas realizadas se demuestran que los parámetros de DBO, DQO, nitritos, sólidos y los coliformes totales y fecales son los principales factores que afectan las características del recurso hídrico, explicando en el 92% el comportamiento del sistema. Los resultados de las encuentas realizadas a los pobladores del corregimiento de Bonda y sus Vereda sobre la percepción de la calidad del agua para consumo, demostraron que son conscientes que el recurso hídrico es de mala calidad, sin embargo solo el 66% de la población hierve el agua y un 26 % no le realiza ningún tipo de tratamiento, representando un riesgo a la salud de dicha comunidad.